ADRA envía recursos y profesionales de todo el mundo a Turquía y Siria
Ya se han contabilizado más de 22 mil muertos como consecuencia del terremoto de magnitud 7,8 que afectó a Turquía y Siria el pasado 6 de febrero. Todavía hay un gran número de personas desaparecidas entre los escombros, además de los miles que han quedado sin hogar, de acuerdo con los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La catástrofe afectó varias ciudades de ambos países y, a pesar de que hay más víctimas en Turquía, la situación en Siria también es compleja, debido a la falta de infraestructura y la guerra civil que este país enfrenta desde hace varios años. La Agencia de Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) en Siria, que ya tenía varios proyectos en la región, está completamente movilizada para amenizar el sufrimiento de la comunidad.
El jueves 9 de febrero, dos equipos de ADRA llegaron a Adana, al sur de Turquía. Al no haber sido tan afectada por los temblores, esta ciudad se convirtió en la puerta de entrada aérea de las agencias humanitarias, para luego poder dirigirse, por tierra, hasta las regiones que más necesitan ayuda. En este momento, hay 12 personas trabajando y se esperan otros profesionales. La mayor dificultad, según Alfred Erfurth, director financiero de la Iglesia Adventista en el oeste asiático, ha sido avanzar por las rutas, que están congestionadas por el gran número de personas que intentan llegar y salir de las ciudades destruidas.
El único templo adventista de la región turca afectada por el terremoto resistió al impacto, pero no se lo considera un lugar seguro. Sin embargo, pastores, empleados de la denominación y miembros voluntarios están trabajando para asistir a la población. De acuerdo con Eric Leichner, responsable de la respuesta a emergencias de ADRA en Sudamérica, para dar visibilidad a las acciones, ADRA Internacional está reuniendo recursos nacionales, regionales y de otras instituciones alrededor del mundo para enviarlos a la región.
Acciones inmediatas
ADRA también es responsable de organizar todas las acciones y distribuir los recursos financieros y humanos en las áreas más necesitadas. En este momento, la agencia está buscando la autorización del gobierno turco para actuar de manera más efectiva, mientras se trabaja en colaboración con otras organizaciones locales. En Siria, donde hay una sede oficial de ADRA, se está dando apoyo y asistencia a los que viven allí.
Desde la sede sudamericana de ADRA, se envían 30 mil dólares para atender las necesidades de la emergencia. En estos primeros momentos, el objetivo es proveer agua, alimentos y refugios para quienes se quedaron sin hogar o que necesitan salir de sus casas debido a los riesgos. En Siria, la falta de saneamiento básico propicia los casos de cólera, y la falta de hospitales obstaculiza el tratamiento a las personas.
Además de la ayuda en dinero, ADRA en Sudamérica ha enviado a un profesional para apoyar las iniciativas en Turquía. Desde 1990, Marcelo Arndt ha trabajado en países como Mozambique, Angola, Kurdistán y Sudán. Llegó a Turquía el 8 de febrero, dos días después del terremoto, y ahora se encuentra trabajando con los equipos que van a los lugares afectados para hacer evaluaciones y organizar las respuestas. Se quedará en el país por cuatro semanas más.
Apoyo de todos lados
Las iglesias de otras partes de Turquía están enviando donaciones de ropas de abrigo y cobertores para las familias que están siendo relocalizadas en otras ciudades y pueblos. Los adventistas están trabajando también en el transporte de esas familias, de acuerdo con lo que cuenta Alfredo Erfurth.
Rafael Porto, pastor y director de Comunicación de la Iglesia Adventista en el oeste asiático, explica que el clima es de duelo total. No ha muerto ningún adventista en el país, pero muchos han perdido familiares y amigos. De acuerdo con el pastor, el frío y la nieve reducen aun más la posibilidad de encontrar sobrevivientes.
"Toda la población se moviliza para donar ropas y cobertores para los afectados por el terremoto. Todas las ciudades grandes han montado centros de recibimiento de donaciones de ropas, cobertores, materiales de higiene y muchas cosas más que están necesitando las familias alcanzadas por el desastre. El Ejército y la Prefectura llevan en avión, todos los días, los artículos más urgentes", detalla Porto.
El pastor además agrega que “el gobierno y una organización local especialista en desastres están buscando sobrevivientes entre los escombros, y ADRA, junto a otras ONG y voluntarios, distribuyen alimentos y agua para todos los que están en necesidad”.
Para hacer su donación, ingrese al sitio de ADRA Internacional (en inglés). Se puede contribuir con cualquier monto (las donaciones se hacen en dólares).