Después de 20 años lejos de Dios, mujer regresa al Salvador
Abigail Rous Gómez Cuevas (42 años de edad) de Profesión Docente en Educación Diferencial estuvo alejada de Dios por más de 20 años. Sus padres la llevaron desde pequeña a la Iglesia Adventista del Séptimo Día, donde disfrutaba de las actividades, aprendía grandes enseñanzas y principios, sin embargo, en su juventud se alejó de Dios.
En el año 2020, cuando llegó la pandemia, sus padres, aferrados al Señor, comprometidos con su iglesia, oraban siempre por el regreso de su hija Abigail a los caminos de Dios. En marzo de 2021 su mamá, María Cuevas (63 años) enfermó muy gravemente por el Covid-19, sin vacuna, y murió. Tiempo después, el 16 de julio de 2021 su padre, Nail Gómez (79 años) comerciante, marino, un hombre de fe, también se contagió y murió. Ocho meses después, su hermana Daphne con 39 años de edad, al no soportar esta situación, de haber perdido a sus padres, se suicidó en casa.
Todos estos hechos hicieron que Abigail se alejara más de Dios, que dejara de creer en el Salvador e ingresó a sectas para practicar el ocultismo. Sus padres le habían regalado una Biblia y la botó a la basura cuando sucedió lo de su hermana Daphne, pues ya no quería saber nada de Dios.
¿Cómo llegó Dios de nuevo a su vida?
Durante el mes de abril de este año, se llevó a cabo la campaña de “Semana Santa” y en la Iglesia Adventista Central de la ciudad de Los Ángeles, Chile, también se realizaba esta programación especial. Los hijos de Abigail: Matías Matus (16 años), Valentina Cheguan (14 años), y Emilia Cheguan (9 años), quienes participan activamente del Club de Conquistadores y Aventureros, siempre oraban por su mamita, e insistentemente la invitaron a la semana especial que se estaba desarrollando, con el pretexto de que ellos tendrían una participación especial como club.
Finalmente, Abigail se animó a asistir a la iglesia, pero nunca imaginó que el mensaje entregado por el pastor Michael Mercado, Evangelista de la Red Nuevo Tiempo Chile, tocaría profundamente su corazón. Asistió todas las noches, su corazón era conmovido por el Espíritu Santo con cada mensaje, fue recepcionada con tanto amor por su iglesia que desde hace 20 años no la veían, la abrazaron, aceptó ser visitada, y con lágrimas en los ojos manifestó su deseo de ser perdonada por el Señor y regresar a sus caminos.
Es así que el sábado 8 de abril, Abigail entregó su vida a Jesús mediante el bautismo, una mujer que salió de las tinieblas y volvió a admirar la luz de Jesús.
Jesús venció para que la vida de Abigail fuera restaurada, perdonada y amada completamente. Hoy está feliz, siente paz en su vida, es un gozo para ella ser parte de la familia de Dios. Tiene la certeza de que volverá a ver a sus padres cuando Cristo regrese porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. (1 Tesalonicenses 4:16) Hoy es una nueva criatura en el Señor.