La Iglesia Adventista en el norte de Perú se sumó a la campaña "Basta de Silencio". Ejecutaron diversas acciones de concientización sobre la violencia obstétrica. Las mujeres gestantes sintieron el abrazo y apoyo de toda la hermandad.
Brindaron charlas de prevención en los colegios del Estado Peruano y privados, adventistas y no adventistas, a través de profesionales en salud mental y física. Visitaron Centros Emergencia Mujer (ubicadas en las comisarías), hospitales, comedores populares, entre otros lugares.
En la fecha central de la campaña, sábado 26 de agosto, realizaron programas de concientización para la Iglesia y la comunidad, encuentro de 500 mujeres en la ciudad de Jaén, caminatas con mensajes de solidaridad y el proyecto Tardes Misioneras, visitando casas, parques, para enseñarles sobre la esperanza en Cristo Jesús.
Entre otras actividades, para los niños desarrollaron talleres sobre la prevención de la violencia, en las iglesias, locales y lozas deportivas, con la presencia del show “Mis Amigos”, y los talleres “El té de muñecas”, dirigidas solo para niñas, y el “te de carros”, dirigido solo para niños.
Iglesia comprometida
Cada acción, cada cartel, cada oración, mostraron a una Iglesia preocupada y comprometida en cuidar y compartir la esperanza y felicidad a miles de hogares y mujeres que serán o son madres.
De esta manera, en cada región del norte de Perú junto a las iglesia locales, se unieron para testificar lo que Dios enseña sobre el cuidado y amor hacia las personas que sufren algún tipo de violencia.
